El ascenso de las temperaturas medias, que alarga las épocas de polinización y las intensifica, la reducción de las precipitaciones, así como la modificación en los estilos de vida han provocado un incremento de la predisposición a sufrir alergia a edades cada vez más tempranas. Síntomas ...
El ascenso de las temperaturas medias, que alarga las épocas de polinización y las intensifica, la reducción de las precipitaciones, así como la modificación en los estilos de vida han provocado un incremento de la predisposición a sufrir alergia a edades cada vez más tempranas.
Síntomas
Secreción nasal, picazón, ojos hinchados y ataques de estornudos son síntomas muy habituales en los cambios de estación y motivo de visita en las consultas pediátricas.
¿Rinitis alérgica o resfriado?
La rinitis alérgica es una inflamación de la mucosa de la nariz, causada por la reacción alérgica de la misma a sustancias que hay en aire y que entran en contacto con ella que suelen cursan con síntomas como varios estornudos seguidos, picor de nariz y ojos, moco líquido, o congestión nasal.
Los síntomas típicos de la rinitis alérgica son muy parecidos a los de un catarro normal producido por un virus. Esto es muy frecuente en niños, sobre todo si son pequeños. Por eso hay que valorar varios factores como la edad del niño, el factor hereditario, si los síntomas tienden a repetirse con más o menos frecuencia, en qué época del año son más persistente.
Diagnóstico correcto
Se debe tener en cuenta que en los niños a partir de los 4 años aproximadamente los catarros víricos de repetición ya van siendo menos frecuentes, por lo que la repetición o persistencia de los síntomas «catarrales “y más en épocas como el otoño o primavera pueden ser indicar que se trata de una alergia.
Es necesario que el pediatra remita al paciente a un alergólogo pediátrico para realizar las evaluaciones y tratamientos. Aunque existen muchos antihistamínicos, descongestivos e inhaladores nasales de venta libre es muy importante asegurar que la alergia y el asma del niño estén diagnosticados correctamente y que los síntomas están recibiendo el tratamiento apropiado.
Realizar un correcto enfoque diagnóstico y de tratamiento del problema, e identificar si existen evidencias de que pueda existir una base alérgica es clave. Las tres grandes manifestaciones de la alergia, además de las alergias alimentarias, son la dermatitis atópica, la rinoconjuntivitis y el asma bronquial.
