Hoy en día hacemos todo cuanto más rápido mejor, vamos con prisas a todos lados y no dedicamos suficiente tiempo a las cosas importantes, como puede ser sentarnos a la mesa y comer. La nutricionista de Vithas Málaga, María Onieva Moreno nos da unas pautas para hacer una parada en nuestra vid...
Hoy en día hacemos todo cuanto más rápido mejor, vamos con prisas a todos lados y no dedicamos suficiente tiempo a las cosas importantes, como puede ser sentarnos a la mesa y comer.
La nutricionista de Vithas Málaga, María Onieva Moreno nos da unas pautas para hacer una parada en nuestra vida y sentarnos a disfrutar de la comida y dedicarle el tiempo que merece “y así transmitirles a nuestros hijos que deben aprender unas normas muy importantes pero muy sencillas para disfrutar el momento de la comida”
- Manos limpias antes de sentarse a la mesa:
Debemos limpiar y desinfectar las manos de bacterias.
Muchas veces utilizamos las manos para comer (pizza, hamburguesas, bocadillos…), por lo que las manos deben estar limpias para no pasar esas bacterias al alimento.
- No ver la televisión mientras se come:
Aunque esto lo hagamos es un fallo muy común. Cuando vemos la televisión no prestamos atención a lo que comemos ni a la cantidad que comemos y muchas veces comemos más de lo que realmente nos apetece porque estamos mucho más atentos al programa de ese momento que a nuestro plato.
3. Masticar muy bien cada bocado:
La masticación nos ayuda a triturar los alimentos para poder ingerirlos y digerirlos mejor. Estimula el desarrollo de la mandíbula cuando están en fase de crecimiento y fortalece las encías.
- Hablar en la mesa de cómo nos ha ido el día:
Es importante mantener una conversación agradable en la mesa, y que nuestro hijo participe es fundamental. Preguntar qué tal ha ido el día, qué planes tienen para la tarde… Los mantiene motivados y sienten que forman parte de la conversación en la mesa.
- Si no les gusta la comida…dar otra oportunidad.
Cuando no les gusta la comida entramos en zona de arenas movedizas: comienzan los llantos, malas caras…
Debemos intentar no llegar a ese punto, dialogar con ellos e intentar llegar a un acuerdo “si te tomas cuatro trocitos más vamos luego a dar un paseo”.
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